Gerald Francis Ridsdale, exsacerdote australiano de 83 años, ha confesado por tercera vez que es culpable de haber abusado sexualmente de decenas de niños entre los años 1962 y 1988.
El sujeto, quien cumple una sentencia de 28 años de prisión desde 1994, amenazaba de distintas formas a sus víctimas, con el objetivo de que mantengan silencio. Y, si bien no está confirmado, se cree que en realidad violó a cerca de mil menores
Según el fiscal Jeremy McWilliams, quien declaró ante la Corte del Victorian County y cuyo testimonio fue recogido por Infobae, una vez el padre de una niña colaboró en la violación de su hija.
“El padre la llevó al confesionario, donde la desvistió. Después la condujo hasta el altar, donde la recostó”, declaró McWilliams. Llegó Ridsdale, quien le susurró a la menor que “Jesús murió por nuestros pecados, entonces podemos ser perdonados y si confieso este pecado podré ser perdonado”.
A otra de sus víctimas, a quien ultrajó en al altar de la iglesia, le afirmó que “era parte del trabajo de Dios”. “Le dijo que si alguna vez le contaba a alguien, Dios castigaría a su familia”, añadió el fiscal.
Las revelaciones han causado mayor impacto en los ciudadanos australianos pues el sujeto, en un juicio anterior, fue condenado por ultrajar a 53 niños entre 1961 y 1980.
Estas fueron brindadas durante el segundo juicio que afronta Ridsdale.
