El presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela Henry Ramos Allup, al referirse a las penurias por las que atraviesa la gente de su país, dijo el viernes que el gobierno de Nicolás Maduro está aportando menos de un 10 por ciento de los dólares necesarios para comenzar a estabilizar la grave escasez de alimentos.
Ramos, una de las principales voces de la posición venezolana, también alabó la gestión del Secretario General de la Organización de Estados Americanos, Luis Almagro, en conseguir la activación de la Carta Democrática Interamericana, calificando la sesión extraordinaria de la OEA del jueves como un triunfo para las fuerzas democráticas de su país.
En una rueda de prensa sostenida poco después de aterrizar el viernes en Miami, Ramos describió la crisis humanitaria por la que atraviesan los venezolanos, en medio del colapso económico provocado por 17 años de políticas antiempresariales del chavismo, y advirtió que la crisis con los alimentos podría empeorar.
“Ellos [en el gobierno] están necesitando, para medio estabilizar el suministro de alimentos, una cantidad equivalente a $500 millones mensuales, y solo están recibiendo aproximadamente $30 millones”, manifestó el dirigente de la oposición, citando informes internos del propio gobierno.
Según Ramos, la solución solo podrá ser alcanzada con la juramentación de un nuevo gobierno en Venezuela que esté dispuesto a desmantelar las políticas erradas y atender todas las distorsiones económicas acumuladas bajo los últimos años, que han convertido a un país, con una de las mayores reservas petroleras del planeta, en una de las naciones más pobres del hemisferio.
“Mientras ellos sigan allí, todos los males y las tragedias de Venezuela se van a agravar cada día más”, enfatizó, mientras iba acompañado por los también opositores Carlos Vecchio, coordinador del partido Voluntad Popular; el legislador Luis Florido, así como por los diputados de Acción Democrática William Dávila y Luis Carlos Padilla.
El colapso del modelo socialista aplicado por el chavismo ha creado una crisis sin precedentes en el país sudamericano, donde la población se ve obligada a pasar horas esperando para entrar a los supermercados para llevarse los pocos artículos aún disponibles, coinciden la mayoría de los economistas.
Al hablar sobre la OEA, Ramos dijo que el chavismo sufrió un duro golpe en la sesión extraordinaria luego de que los países miembros de la organización multilateral aprobaran la activación de la Carta Democrática Interamericana para atender la crisis de su país, con una votación de 20 votos a favor, 12 en contra y dos abstenciones.
“La sesión de ayer fue un rotundo éxito para la Venezuela democrática porque se logró la realización de la sesión que el gobierno quería que no se hiciera, porque se aprobó la agenda que el gobierno no quería que se aprobara [y] porque se activó la Carta que el gobierno no quería que se activara”, dijo Ramos.
La activación de la Carta autoriza a la organización multilateral a examinar las múltiples denuncias de que Venezuela, bajo la conducción del gobernante Nicolás Maduro, ha abandonado el camino de las democracias y emprender esfuerzos diplomáticos para atender esas denuncias.
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