Un juez de apelación ha ordenado este domingo la liberación del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, preso desde el pasado 7 de abril por corrupción pasiva, según han confirmado fuentes oficiales. El juez Rogerio Favreto, del Tribunal Regional Federal de la Cuarta Región (TRF-4), con sede en Porto Alegre, concedió un habeas corpus a Lula y pidió que la medida sea cumplida en régimen de “urgencia” para que pueda ejercer sus derechos como precandidato a la presidencia de Brasil. El juez federal Sergio Moro, que condenó al expresidente, ha reaccionado rápidamente emitiendo un nuevo auto en el que cuestiona la competencia de Favreto para adoptar esta decisión y dictamina que esta orden no puede llevarse a cabo.
El habeas corpus fue presentado este viernes por los diputados Wadih Damous, Paulo Pimaenta y Paulo Teixeira, todos del PT. El juez Favreto ha determinado que sea liberado este domingo. “Cúmplase con régimen de urgencia en esta fecha mediante la presentación de la Orden de Excarcelación o de esta orden a cualquier autoridad policial presente en la sede de prisiones de la Superintendencia de la Policía Federal en Curitiba, donde se encuentra recluido el sujeto”, ha apuntado Favreto en su auto.
Urgente: el Desembargador Rodrigo Favreto del Tribunal 4to de Porto Alegre ordena que Lula sea liberado hoy (domingo 8/7), por el pedido de habeas corpus de los diputados Wadih Damous, Paulo Pimenta y Paulo Teixeira del Partido de los Trabajadores. pic.twitter.com/etNVleYN5J
— Nacho Lemus (@LemusteleSUR) July 8, 2018
Lula ha sido condenado por el juez federal Sergio Moro y por un tribunal regional —segunda instancia— a doce años de cárcel por los delitos de corrupción pasiva y blanqueo de capitales por aceptar un tríplex de lujo en Sao Paulo como pago de la constructora OAS por sus favores políticos.
El exdirigente sindical ha agotado prácticamente la segunda instancia y solo le queda acudir a los altos tribunales —el Supremo y el Constitucional— para revertir la condena. Si llega a ser firme, la impediría que pueda presentarse en las elecciones presidenciales del 7 y 28 de octubre.