A pesar de que el Papa Francisco estuvo la semana pasada de visita en Latinoamérica y su viaje coincidió justamente con los deplorables hechos ocurridos en El Junquito, el denominado “Sumo Pontífice” no hizo siquiera una breve alusión al hecho o al drama humanitario que padecen los venezolanos.
Francisco se quejó de la corrupción, de la explotación de las grandes corporaciones, pero declinó ir a su natal Argentina para no reunirse con Mauricio Macri y, además, no hizo ninguna referencia a la situación de Venezuela, que hoy es denunciada en prácticamente todo el mundo.
Tuiteros de todo el mundo -católicos y no católicos- le cayeron encima por su indolencia y le recordaron que como “supuesto enviado de Cristo” su misión es estar del lado de los que sufren.
Periodistas y personalidades insistieron en que la situación en Venezuela es sumamente grave como para mantener tanto silencio en torno a ella.
Respeto mucho a @Pontifex_es pero en #Peru en vez de pedir solución pacífica para la República Democrática del Congo se tendría que preocupar por crisis #Venezuela
— Carlos Montero (@CMonteroOficial) 21 de enero de 2018
Me sorprende tanto el desleal silencio del Papa Francisco @Pontifex sobre la horrible realidad que hoy viven los habitantes de #Venezuela. Horrible silencio de alguien a quienes muchos le tienen tanta fe.
— Yusnaby Pérez (@Yusnaby) 19 de enero de 2018
El Papa Francisco demostró un notable compromiso con DDHH durante su gira a America Latina:
1. No se reunió con víctimas de fujimorismo que se lo pidieron;
2. No denunció públicamente al régimen de Venezuela;
3. Respaldó a un obispo acusado de encubrir pedofilia.
Impresionante! pic.twitter.com/ARks6gyX7x— José Miguel Vivanco (@JMVivancoHRW) 22 de enero de 2018