Hace días preguntaba públicamente qué haríamos en caso de que sucediera lo que era fácil anticipar. Pues, ya estamos ante esa realidad y creo que esa respuesta debe darse ya.
La dirigencia de la oposición debe entender que este linchamiento de Leopoldo lo desborda a él mismo. Que este abominable acto es el preámbulo para ejecutar una sentencia de muerte para lo que nos queda de libertad.
Leopoldo es hoy el dirigente político de mayor significación nacional e internacional. Las encuestas locales lo confirman y la comunidad internacional lo reconoce así. Y lo apoya. El régimen ha entendido claramente las implicaciones de esta realidad para su futuro político. Un país que en 80% rechaza al régimen debe poder activarse. Y no es cacerolas lo que toca. Solo con acciones de protesta firmes.
La pandilla Maduro-Cabello-Padrino nos ejecutan hoy por intermedio de Leopoldo. Mañana serán los que queden en la resistencia. Uno por uno es lo que se proponen ejecutar a la vista de todos.
Esta pandilla Maduro-Cabello-Padrino que hoy ha actuado vilmente es el verdadero verdugo. La jueza y los fiscales son unos pobres diablos a su servicio. Pero no escaparán de la vindicta pública.
Mi absoluta solidaridad con la causa de Leopoldo que hoy se confirma como la de los venezolanos que queremos vivir en libertad.